28.8 C
Miami
jueves, julio 18, 2024
Más


    Marcos 7 - Reina Valera 1858 (Nuevo Testamento)

    Lo que contamina al hombre

    1. Y SE juntaron á él Fariséos, y algunos de los escribas que habian venido de Jerusalem.

    2. los cuales viendo á algunos de sus discípulos comer pan con manos comunes, es á saber, por lavar, los condenaban.

    3. (Porque los Fariséos, y todos los Judíos, teniendo la tradicion de los ancianos, si muchas veces no se lavan las manos, no comen;

    4. y volviendo de la plaza, si no se lavaren, no comen; y otras muchas cosas hay que tomaron para guardar, como el lavar de los vasos de beber y de los jarros, y de los vasos de metal, y de los lechos.)

    5. Y le preguntaron los Fariséos y los escribas: ¿Por qué tus discípulos no andan conforme á la tradicion de los ancianos, mas comen pan con las manos por lavar?

    6. Y respondiendo él, les dijo: Hipócritas, bien profetizó de vosotros Isaías, como está escrito: Este pueblo con los labios me honra, mas su corazon lejos está de mi;

    7. y en vano me honran, enseñando doctrinas, mandamientos de hombres:

    8. porque dejando el mandamiento de Dios, teneis la tradicion de los hombres: el lavar de los jarros, y de los vasos de beber; y haceis muchas cosas semejantes á estas.

    9. Les decia tambien: Bien invalidais el mandamiento de Dios para guardar vuestra tradicion.

    10. Porque Moisés dijo: Honra á tu padre y á tu madre; y: El que maldijere al padre ó á la madre morirá de muerte.

    11. Y vosotros decis: El hombre dirá al padre ó á la madre: El Corban (quiere decir, don mio) á ti aprovechará,

    12. y no le dejais mas hacer por su padre, ó por su madre;

    13. invalidando la palabra de Dios con vuestra tradicion que disteis: y muchas cosas haceis semejantes á estas.

    14. Y llamando á toda la compañía, les dijo: Oidme todos, y entended.

    15. Nada hay fuera del hombre que entre en él, que le pueda contaminar: mas lo que sale de él, aquello es lo que contamina al hombre.

    16. Si alguno tiene oidos para oir, oiga.

    17. Y entrándose de la compañía en casa, le preguntaron sus discípulos de la parábola.

    18. Y les dice: ¿Así tambien vosotros sois sin entendimiento? ¿no entendeis que todo lo de fuera que entra en el hombre, no le puede contaminar?

    19. porque no entra en su corazon, sino en el vientre; y sale el hombre á la secreta, y purga todas las viandas.

    20. Mas decia: Que lo que del hombre sale, aquello contamina al hombre:

    21. porque de dentro, del corazon de los hombres, salen los malos pensamientos, los adulterios, las fornicaciones, los homicidios,

    22. los hurtos, las avaricias, las maldades, el engaño, las desvergüenzas, el mal ojo, las injurias, la soberbia, la locura:

    23. todas estas maldades de dentro salen, y contaminan al hombre.

    La fe de la mujer sirofenicia

    24. Y LEVANTÁNDOSE de allí , se fué á los términos de Tyro y de Sidón, y entrando en casa quiso que nadie lo supiese: mas no pudo esconderse.

    25. Porque una mujer, cuya hija tenia un espíritu inmundo, luego que oyó de él vino, y se echó á sus piés.

    26. Y la mujer era Griega, Syrophenisa de nacion, y le rogaba que echase fuera de su hija al demonio.

    27. Mas Jesus le dijo: Deja primero hartarse los hijos: porque no es bien tomar el pan de los hijos, y echarlo á los perrillos.

    28. Y respondió ella, y le dijo: Sí, Señor, porque los perrillos debajo de la mesa comen de las migajas de los hijos.

    29. Entonces le dice: Por esta palabra, vé: el demonio ha salido de tu hija.

    30. Y como fué á su casa, halló que el demonio habla salido, y la hija echada sobre la cama.

    Jesús sana a un sordomudo

    31. Y VOLVIENDO á salir de los términos de Tyro y de Sidón, vino á la mar de Galiléa por mitad de los términos de Decápolis.

    32. Y le traen un sordo y tartamudo, y le ruegan que le ponga la mano encima.

    33. Y tomándole de la compañía aparte, metió sus dedos en las orejas de él, y escupiendo tocó su lengua.

    34. Y mirando al cielo gimió, y dijo: Ephata; que es decir: Sé abierto.

    35. Y luego fueron abiertas sus orejas; y fué desatada la ligadura de su lengua, y hablaba bien.

    36. Y les mandó que no lo dijesen á nadie: mas cuanto mas les mandaba, tanto mas y mas lo divulgaban;

    37. y en grande manera se espantaban, diciendo: Bien lo ha hecho todo: hace á los sordos oir, y á los mudos hablar.