32.6 C
Miami
miércoles, julio 17, 2024
Más


    Lucas 21 - Scio de San Miguel (Solo los Evangelios)

    La ofrenda de la viuda

    1. Y estando mirando, vio los ricos, que echaban sus ofrendas en el gazofilacio;

    2. Y vio también una viuda pobrecita, que echaba dos pequeñas monedas.

    3. Y dijo: "En verdad os digo, que esta pobre viuda ha echado más que todos los otros.

    4. Porque todos estos han echado para las ofrendas de Dios, de lo que les sobra(a); mas esta de su pobreza(b) ha echado todo el sustento, que tenía(c)".

    Jesús predice la destrucción del templo

    5. Y dijo a algunos, que decían del templo, que estaba adornado de hermosas piedras y de dones(d):

    6. "Estas cosas que veis, vendrán días, cuando no quedará piedra sobre piedra, que no sea demolida".

    Señales antes del fin

    7. Y le preguntaron, y dijeron: "Maestro, ¿cuándo será esto, y qué señal habrá, cuando esto comenzare a ser?"

    8. Él dijo(e): "Mirad, que no seais engañados porque muchos vendrán en mi nombre, diciendo: ‘Yo soy(f)’, y ‘el tiempo está cercano’. Guardaos pues de ir en pos de ellos.

    9. Y cuando oyéreis guerras y sediciones, no os espantéis; porque es necesario que esto acontezca primero, mas no será luego el fin(g)".

    10. Entonces les decía: "Se levantará gente contra gente, y reino contra reino.

    11. Y habrá grandes terremotos por los lugares, y pestilencias, y hambres, y habrá cosas espantosas, y grandes señales(h) del cielo.

    12. Mas antes de todo esto os prenderán, y perseguirán, entregándoos a las sinagogas y a las cárceles, y os llevarán a los reyes y a los gobernadores, por mi nombre;

    13. Y esto os acontecerá en testimonio(i).

    14. Tened pues fijo en vuestros corazones de no pensar antes cómo(j) habéis de responder.

    15. Porque yo os daré boca(k) y saber, al que no podrán resistir ni contradecir todos vuestros adversarios.

    16. Y seréis entregados de vuestros padres, y hermanos, y parientes, y amigos, y harán morir a algunos de vosotros;

    17. Y os aborrecerán todos por mi nombre.

    18. Mas no perecerá un cabello de vuestra cabeza.

    19. Con vuestra paciencia poseeréis vuestras almas(l).

    20. Pues cuando viéreis a Jerusalén cercada de un ejército(m), entonces sabed que su desolación está cerca.

    21. Entonces los que están en la Judea, huyan a los montes; y los que en medio de ella(n), sálganse; y los que en los campos(o), no entren en ella;

    22. Porque estos son días de venganza, para que se cumplan todas las cosas, que están escritas.

    23. Mas ¡ay de las preñadas y de las que darán de mamar(p) en aquellos días! Porque habrá grande apretura sobre la tierra, e ira para este pueblo;

    24. Y caerán a filo de espada, y serán llevados en cautiverio a todas las naciones, y Jerusalén será hollada de los gentiles(q), hasta que se cumplan los tiempos de las naciones(r).

    La venida del Hijo del Hombre

    25. Y habrá señales en el sol, y en la luna, y en las estrellas; y en la tierra consternación de las gentes por la confusión que causará el ruido del mar y de sus ondas(s),

    26. Quedando los hombres yertos por el temor y recelo de las cosas, que sobrevendrán, a todo el universo; porque las virtudes de los cielos serán conmovidas.

    27. Y entonces verán al Hijo del hombre venir sobre una nube con grande poder y majestad.

    28. Cuando comenzaren pues a cumplirse estas cosas, mirad, y levantad vuestras cabezas(t), porque cerca está vuestra redención".

    29. Y les dijo una semejanza: "Mirad la higuera, y todos los árboles:

    30. Cuando ya producen de sí el fruto, entendéis que cerca está el estío.

    31. Así también vosotros, cuando viéreis hacerse estas cosas, sabed que cerca está el reino de Dios.

    32. En verdad os digo, que no pasará esta generación(u), hasta que todas estas cosas sean hechas.

    33. El cielo y la tierra pasarán; mas mis palabras no pasarán.

    34. Mirad pues por vosotros, no sea que vuestros corazones se carguen de glotonería, y de embriaguez, y de los afanes de esta vida, y que venga de repente(v) sobre vosotros aquel día;

    35. Porque así como un lazo(w) vendrá sobre todos los que están sobre la haz de toda la tierra.

    36. Velad pues(x) orando en todo tiempo, para que seais dignos de evitar todas estas cosas, que han de ser, y de estar en pie delante del Hijo del hombre(y)".

    37. Y estaba enseñando de día en el templo; y de noche se salía, y lo pasaba en el monte, llamado del Olivar.

    38. Y todo el pueblo madrugaba, por venir a oirle en el templo.