29.9 C
Miami
sábado, agosto 17, 2024
Más


    Job 38 - Traducción del Nuevo Mundo (Testigos de Jehová)

    Jehová convence a Job de su ignorancia

    1. Y Jehová procedió a responder a Job desde la tempestad de viento y decir:

    2. “¿Quién es este que está oscureciendo el consejo con palabras sin conocimiento?

    3. Cíñete los lomos, por favor, como hombre físicamente capacitado, y déjame interrogarte, y tú dame informe.

    4. ¿Dónde te hallabas tú cuando yo fundé la tierra? Infórma[me], si de veras conoces el entendimiento.

    5. ¿Quién fijó sus medidas, si acaso lo sabes, o quién extendió sobre ella el cordel de medir?

    6. ¿En qué han sido hundidos sus pedestales con encajaduras, o quién colocó su piedra angular,

    7. cuando las estrellas de la mañana gozosamente clamaron a una, y todos los hijos de Dios empezaron a gritar en aplauso?

    8. ¿Y [quién] con puertas puso barricada al mar, el cual empezó a salir como cuando irrumpió de la matriz;

    9. cuando puse la nube por su vestido y densas tinieblas por su pañal,

    10. y procedí a dividir mi disposición reglamentaria sobre él y a colocar una barra y puertas,

    11. y pasé a decir: ‘Hasta aquí puedes venir, y no más allá; y aquí quedan limitadas tus orgullosas olas’?

    12. ¿Fue desde tus días en adelante cuando diste órdenes a la mañana? ¿Hiciste tú que el alba conociera su lugar,

    13. que se asiera de las extremidades de la tierra, para que los inicuos fueran sacudidos de ella?

    14. Se transforma como barro bajo un sello, y las cosas toman su puesto como en la ropa.

    15. Y de los inicuos se retiene su luz, y el mismísimo brazo elevado llega a ser quebrado.

    16. ¿Has llegado tú hasta las fuentes del mar, o en exploración de la profundidad acuosa has andado de una parte a otra?

    17. ¿Te han sido descubiertas las puertas de la muerte, o puedes ver las puertas de la sombra profunda?

    18. ¿Has considerado inteligentemente los anchos espacios de la tierra? Infórmalo, si has llegado a saberlo todo.

    19. ¿Dónde, pues, está el camino hacia donde reside la luz? En cuanto a la oscuridad, ¿dónde, pues, está su lugar,

    20. para que la lleves hasta su límite, y para que entiendas las veredas que van a su casa?

    21. ¿Has llegado a saber, porque en aquel tiempo nacías, y [porque] en cuanto a número tus días son muchos?

    22. ¿Has entrado en los almacenes de la nieve, o ves siquiera los almacenes del granizo,

    23. que yo he retenido para el tiempo de angustia, para el día de pelea y guerra?

    24. ¿Dónde, pues, está el camino por el cual se distribuye la luz, [y] el viento del este se esparce sobre la tierra?

    25. ¿Quién ha dividido un canal para la inundación y un camino para el tronador nubarrón de tempestad,

    26. para hacer llover sobre la tierra donde no hay hombre, [sobre] el desierto en el cual no hay hombre terrestre,

    27. para satisfacer lugares azotados por tempestades y desolados, y hacer brotar el crecimiento de hierba?

    28. ¿Existe padre para la lluvia?, ¿o quién dio a luz las gotas del rocío?

    29. ¿Del vientre de quién realmente sale el hielo? Y en cuanto a la escarcha del cielo, ¿quién en realidad la hace nacer?

    30. Las aguas mismas se mantienen escondidas como por piedra, y la superficie de la profundidad acuosa se hace compacta.

    31. ¿Puedes tú atar firmemente las ligaduras de la constelación Kimá, o puedes desatar las cuerdas mismas de la constelación Kesil?

    32. ¿Puedes hacer salir la constelación Mazarot a su tiempo señalado? Y en cuanto a la constelación Ash al lado de sus hijos, ¿puedes conducirlos?

    33. ¿Has llegado a conocer los estatutos de los cielos, o podrías tú poner su autoridad en la tierra?

    34. ¿Puedes alzar tu voz siquiera a la nube, para que una masa agitada de agua misma te cubra?

    35. ¿Puedes enviar relámpagos para que vayan y te digan: ‘¡Aquí estamos!’?

    36. ¿Quién puso sabiduría en las capas de las nubes, o quién dio entendimiento al fenómeno celeste?

    37. ¿Quién puede, con exactitud, numerar las nubes con sabiduría?, o los jarros de agua del cielo... ¿quién [los] puede volcar,

    38. cuando el polvo se derrama como en una masa fundida, y los mismísimos terrones se pegan unos a otros?

    39. ¿Puedes tú cazar presa para un león mismo, y puedes satisfacer el vivo apetito de leones jóvenes,

    40. cuando se agazapan en los escondites, [o] se quedan echados en la guarida para estar al acecho?

    41. ¿Quién le prepara al cuervo su alimento cuando sus propios polluelos claman a Dios por ayuda, [cuando] siguen errantes porque no hay nada de comer?